Si el pez nada, ¿La vaca todo?

En la soledad del pensador, esa que sólo aparece una vez al día cuando grandes incógnitas existenciales invaden tu atormentado cerebro, para estrujar tus neuronas en busca de la verdad más pura y absoluta. O sea, cuando estás cagando a gusto y una puta idea te baila tanto en la cabeza que te olvidas de limpiarte el culo, en ese instante de grandes pensamientos es cuando me pregunto: ¿Por qué si "el pez nada, la vaca todo"? ¿Acaso tiene sentido esa afirmación? ¿Qué oscuros secretos encierra ésta misteriosa frase?

He estado investigando en bibliotecas, leídos decenas de libros incunables escritos hace cerca de 500 años y al parecer ésta frase podría tener algo que ver con los Caballeros Templarios del Medioevo. Una frase críptica, indescifrable con más de ocho siglos de antigüedad... que tiene como sagrada misión guardar los tesoros más ocultos de éstos monjes-soldado. Pensad con detenimiento porqué la "vaca todo" solamente si el "pez nada"...

¿Qué es ese "todo" que encierra la vaca en cuestión? Empezad buscando su significado en la íntima relación del ganado vacuno con los ideales de los filósofos sofistas griegos, tal y como hice yo, y veréis que que es una jodida pérdida de tiempo porque no se parecen ni en la postura para mear. Mejor busca en el "Qué me dices", enciclopedia actualizada del mundo moderno, para averiguar lo siguiente que voy a explicarte. Si partimos del siguiente silogismo que me he sacado del nabo:

- "Pez = Templario" y "Todo = Secretos".

Parece que quiera decirnos que cuando el pez nada (desaparición de los templarios), una vaca nos revelará los secretos de los Templarios, ¿Pero qué vaca es capaz de tal proeza? Pensadlo bien: si la Gioconda de Da Vinci esconde un secreto bajo su extraña sonrisa, ¿No creéis que esa mueca es tan enigmática como la sonrisa de "La Vaca Que Ríe"? Mis suposiciones no andan muy desencaminadas cuando descubres que los quesitos "La Vaca Que Ríe" son un producto a consumir en un ambiente templado... y "templado = templario". Más claro, agua.

Pero que no se nos pase de largo algunos detalles a tener en cuenta de la religión egipcia. La "vaca todo" podría ser Hathor, diosa del amor y la fertilidad egipcia y "el pez nada" es sin duda Osiris, también dios de la fertilidad y la resurrección. ¿Qué se nos intenta decir con eso de que "si el pez nada, la vaca todo"? ¿Que a Osiris no se le pone tiesa cuando Hathor tiene ganas de follar? Seguramente sea una frase simbólica dedicada a la impotencia masculina.

Así que, si alguna vez te sueltan la afirmación "si el pez nada, la vaca todo" primero pregunta qué saben de los Templarios. Si los conocen, es que estás delante de Tom Hanks y te está sugiriendo que busques sus tesoros con él. Dale una patada en los cojones y dile que se deje de chorradas medievales y haga películas más decentes.

Pero si te dicen que de Templarios nada, que es una frase del Antiguo Egipto, entonces dales una patada en los cojones mientras te cagas en su puta madre: esos mamones te están llamando "impotente de mierda" de manera fina.

¿Es malo olerse los pedos?

Sugerente título sin duda, ésta desconcertante pregunta -cargada de enorme lirismo poético- nos la hemos hecho muchas veces en la privacidad de nuestras vidas. Nadie sabe a ciencia cierta la respuesta porque hay poca información al respecto, es un tema tabú. Nadie se atreve a reconocer que se huele los pedos. No hay trabajos científicos referentes al estudio de los efluvios anales y sus efectos en las fosas nasales (toma pareado) por lo que intentaremos dar alguna idea básica sobre éste noble arte olfativo.

Y uno se pregunta, ¿Porqué ese miedo a reconocerlos públicamente como una parte de tí? Son tuyos, te ha costado un enorme esfuerzo poderlos traer a éste mundo, por tanto deberías estar orgulloso de ellos. Si te tiras un cuesco en el metro, no seas desagradecido y no mires hacia otro lado con tal de no reconocer tu indudable paternidad, ¿Qué clase de ingrato padre eres si le das la espalda a tus amados hijos? No, amigos... a tu primogénito hay que respetarlo, ir de cara, reconocerlo abiertamente y decirle: "ven aquí, pedo mío, me has descosido el ano, pero estoy orgulloso de tí y de tu olor a chorizo de cantimpalo".

Aunque, ante la insistencia de algunas personas, me veo en la obligación de matizar un asunto delicado. Hay que dejar bien claro que lo propio es olerse los pedos de uno mismo, oler las ventosidades de los demás y que encima te guste y te ponga palote es una aberración sexual que necesitaría tratamiento psiquiátrico o, en su defecto, un par de guantazos hasta que le salgan los cojones por las orejas.

Y ya respondiendo a la pregunta, olerse los pedos no es malo si no tienes una sensibilidad extrema al metano, principal ingrediente de los cuescos. En ese caso hay que evitar la exposición directa al gas para evitar reacciones alérgicas. La sugerencia que les hago a los iniciados en éste hobbie es la de degustar sólo los aires creados de la ingesta de ensaladas y verduras, mucho más saludables que los del potaje al chorizo y fabada con butifarra. Otra opción es la de respirar una parte de ellos y alejarse cuando uno empiece a marearse, recomendable tener cerca un pañuelo para posibles arcadas y/o fatigas respiratorias.

Tratemos ahora de un apartado muy importante en ésta curiosa afición: la posición que adoptará nuestro cuerpo a fín de recibir el máximo aporte posible de nuestra flatulencia. Ésto no se puede tomar a la ligera, y se debe ensayar repetidamente a fin de acertar con la que más nos convenga. Siendo indispensable que el ano esté lo más cerca posible de nuestra nariz, puedo recomendaros ésta posición: Siéntate en un sofá, sube las piernas hasta que las rodillas estén por encima de la cabeza, usa las manos para aguantar tus piernas, dobla la espalda hacia adelante acercando tu cara a tu trasero... y finalmente pédete bien pedido. Verás cómo el gas evacuado entra de forma vigorosa, sana y efectiva en toda tu pituitaria.

Para acabar con éste interesante tema, recalco de nuevo que la recreación olfativa de nuestro pedo no es malo, tampoco es uno de los siete pecados capitales ni siquiera es un delito penal. Eso sí, es una guarrada como la copa de un pino, tío marrano y si has leído hasta aquí es porque te los hueles y querías saber si era malo hacerlo o no.

Anda vete a cagar, gorrino, que eres un gorrino.